Hoy como hombre necio,
Inclino mi rostro,
Esta vez que necesito
A mi señor
A mi Dios,
Pues inclino mi rostro
Para hacer una petición
Inclino mi rostro
Para hacer una oración.
Medito pues en que
La mayoría de hombres
Nos acercamos
A ti Señor,
Con una sola intención
Pues nuestro corazón es egoísta
Y lo hacemos por una petición.
Padre mi anhelo es grande,
Padre mi anhelo es tormentoso,
He decidido dar mi corazón
A aquella persona que ignora
Mi existencia,
Padre mi petición es sencilla
Ayúdame a amar como tú lo haces
Ayúdame a amar sin querer nada a cambio
Ayúdame a amar solo por dar
Aquello que tú pusiste en mi corazón
Amor y pasión.
Este es mi clamor esta es mi petición.
Y
te agradezco Padre
por que tan grande
es tu amor
que se que sin
poner objeción
Concederas mi petición.
Hola buenos días amig@, voy estar unos días fuera y no quería irme sin antes pasar a felicitarte el fin de semana.
ResponderEliminarEspero lo pases estupendamente al lado de quienes te aprecian y aprecias, como yo lo pienso pasar con los míos en mi tierra...
Un beso en compañía del “Trasgu” y de la brisa a la orilla del Cantábrico
Muackkkkk
Muackkkkkkkk
María del Carmen.
PD/Te ha quedado sublime!!
Que bonito si sólo fuera una ilusión poetica...Y no una realidad doliente en el alma.
me gusta esa bella peticion u oracion
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